¿Estás enfrentando problemas en tu sitio web que están ahuyentando a tus visitantes y afectando tus conversiones? Si nunca has realizado una auditoría web, es probable que sea el momento de hacerlo. Los sitios web son criaturas complejas y los problemas surgen constantemente; no estarás al tanto de ellos a menos que audites tu sitio con regularidad.
Indice de Contenidos
¿Qué implica auditar un sitio web?
Realizar una auditoría a un sitio web implica analizar cuestiones técnicas, la experiencia del usuario y aspectos de SEO. Algunos de los beneficios de este proceso incluyen encontrar problemas que podrían:
- Afectar el tráfico orgánico de tu sitio web.
- Estar costándote ventas o conversiones.
- Confundir a tus visitantes.
- Tener inconvenientes técnicos.
¿Por dónde empezar?
Algunas herramientas que te recomendamos incluir para tu auditoría son: Google Analytics, Google’s Mobile-Friendly Test Tool, Google PageSpeed Insights, Yoast SEO (o un plugin similar si usas WordPress), Readable/Grammarly y Google Search Console.
1. Revisa tu diseño
El diseño es crucial. Nadie confiará en un sitio web diseñado hace más de 25 años. Además de hacer las cosas atractivas o seguir las tendencias actuales, hay varios elementos que contribuyen a un mal diseño del sitio web:
- Ventanas emergentes y anuncios intrusivos: las ventanas emergentes no son siempre malas, pero el abuso de ellas puede afectar negativamente a las conversiones y al SEO.
- Texto ilegible: asegúrate de usar un tamaño de letra adecuado, una fuente legible y suficiente espacio en blanco. La falta de espacio en blanco puede hacer que la lectura sea desagradable.
- Diseño no responsive: un diseño no responsive puede afectar negativamente tu clasificación en Google y brindar una mala experiencia al usuario. Utiliza un diseño que se adapte a todos los tamaños de pantalla.
- Problemas de color: asegúrate de que el color de tu texto sea legible en el fondo y que no haya combinaciones de colores que causen molestias visuales.
La navegación del sitio es un factor crucial para la experiencia del usuario. Si los visitantes no pueden encontrar fácilmente lo que están buscando, es probable que abandonen tu sitio. Algunos de los problemas más comunes que te impiden aumentar tus conversiones se presentan por:
- Menús complicados: si tus menús tienen demasiadas opciones o son complicados de entender, los visitantes pueden sentirse abrumados y abandonar tu sitio.
- Estructura de URL confusa: una estructura de URL clara ayuda a los visitantes y a los motores de búsqueda a entender la jerarquía de tu sitio web.
- Enlaces rotos o incorrectos: los enlaces rotos pueden ser frustrantes para los visitantes y afectar negativamente a tu SEO.
- Falta de llamadas a la acción: cada página debe tener un propósito y una llamada a la acción clara. Si no está claro qué se supone que deben hacer los visitantes, es menos probable que conviertan.
3. Verifica la compatibilidad con dispositivos móviles
- Usabilidad en dispositivos móviles: asegúrate de que tu sitio sea fácil de usar en dispositivos móviles. Los elementos táctiles deben ser lo suficientemente grandes y los formularios deben ser fáciles de completar.
- Velocidad en dispositivos móviles: la velocidad de carga en dispositivos móviles es importante. Utiliza herramientas como Google PageSpeed Insights para evaluar y mejorar la velocidad de tu sitio web en dispositivos móviles.
4. Revisa problemas técnicos
Algunos problemas técnicos pueden afectar la visibilidad de tu sitio web en los motores de búsqueda. Asegúrate de abordar estos problemas para mejorar tu SEO.
- Archivo robots.txt: verifica que tu archivo robots.txt esté configurado correctamente para permitir que los motores de búsqueda rastreen tu sitio de manera eficiente.
- Mapa de sitio XML: asegúrate de tener un mapa de sitio XML y de enviarlo a Google Search Console. Esto ayuda a los motores de búsqueda a indexar tus páginas de manera más efectiva.
- Errores de rastreo: revisa y corrige cualquier error de rastreo en Google Search Console. Los errores de rastreo pueden afectar la indexación de tus páginas.
5. Asegúrate de que tu sitio sea seguro (HTTPS)
La seguridad del sitio web es importante tanto para la confianza del usuario como para el SEO. Asegúrate de que tu sitio esté configurado con una conexión segura (HTTPS).
- Certificado SSL: verifica que tu sitio tenga un certificado SSL instalado y que esté configurado para usar HTTPS.
6. Mejora la velocidad de tu sitio
La velocidad de carga del sitio web es crucial para la experiencia del usuario y el SEO. Los sitios lentos pueden resultar en tasas de rebote más altas y una menor clasificación en los motores de búsqueda.
- Optimización de imágenes: utiliza formatos de imagen eficientes y comprime las imágenes sin comprometer la calidad.
- Caché del navegador: configura el sitio para enviar encabezados que indiquen al navegador de guardar los recursos que este cargue para que los visitantes no tengan que cargarlos nuevamente cada vez que visitan tu sitio.
- Eliminación de recursos bloqueantes de renderizado: identifica y corrige cualquier recurso que bloquee el renderizado crítico de tu página.
7. Evalúa la calidad de tu contenido
El contenido de alta calidad es fundamental para el éxito de tu sitio web. Asegúrate de ofrecer contenido valioso, relevante y sin errores gramaticales
En conclusión, este proceso de auditoría de sitios web está dirigido a principiantes. Además, existen muchos aspectos técnicos que se pueden analizar en una auditoría de este tipo, pero si intentas mejorar tu posicionamiento en Google y tus conversiones y tienes poca o ninguna experiencia, esta guía es un buen punto de partida.
CEO y Responsable de Proyectos
